Muchas personas preguntan cuáles son las lesiones más frecuentes por lesiones de tráfico. En el post de esta semana nos vamos a ocupar de esta cuestión que pudiendo parecer aledaña, reviste su importancia e interés.
Los accidentes automovilísticos provocan daños. El más obvio y visible es la destrucción del vehículo que sufre durante la colisión. Pero los accidentes automovilísticos también causan daños en nuestro cuerpo que pueden no ser visibles de inmediato.
Teniendo en cuenta que existe una probabilidad del 20% de que un accidente automovilístico nos cause una lesión, es importante saber qué tipo de lesiones pueden ocurrir comúnmente si nos vemos involucrados en un accidente, para anticiparnos a aquellas más peligrosas, las que pueden pasar inadvertidas durante las primeras horas.
Las colisiones de automóviles implican la aplicación de una gran cantidad de fuerza muy rápidamente, ya que dos vehículos chocan entre sí. La dirección y la cantidad de fuerza pueden dañar el cuerpo al torcerlo y doblarlo de una manera que no debe doblar hasta luxar o fracturar el sistema oseo.
Incluso los accidentes automovilísticos más leves pueden causar hematomas. El propio cinturón de seguridad en su función protectora nos puede amoratar el tórax. Por lo general, sanan en una o dos semanas.
Si sientes dolor o molestias en el cuello y la espalda después de una colisión, es probable que hayas sufrido un latigazo cervical, es decir, distensiones en los músculos y ligamentos. Se producen porque la cabeza sale proyectada atrás o adelante por la incercia del impacto y el cuello recibe un trabajo instantáneo de enorme intensidad que lesiona la musculatura cervical.
Por la misma razón, puede causar hernias o rupturas de los discos de la columna vertebral; Lesiones graves que son muy dolorosas y limitan la movilidad de las víctimas de un accidente de tráfico. Estas lesiones no se deben dejar a la paciencia de unos días, sino que debes consultar a tu médico de inmediato.
Al golpear la cabeza puede ocurrir que tengamos transitorias pérdidas de memoria, o que el cerebro no vaya tan rápido como acostumbra. Ponte de inmediato en contacto con tu médico.
Estas lesiones pueden tener efectos potencialmente alteradores de la vida. Pueden afectar a cómo este órgano maneja la información y procesa las emociones.
Después de un accidente existe la posibilidad de desarrollar afecciones emocionales y mentales como el trastorno de estrés postraumático como te hemos contado en otros posts.
Los huesos rotos son lesiones muy comunes y rara vez son permanentes o potencialmente mortales, aunque algunas fracturas pueden requerir cirugía para fijar el hueso y colocar los accesorios para ayudar a que los huesos sanen. Entre los más frecuentes: romperse el brazo atrapado entre el cuerpo y la puerta o las costillas con el cinturón en accidentes de la mayor intensidad.
Tus órganos son delicados. Las fuerzas de un accidente automovilístico pueden dañarlos y hacer que sangren. Estas lesiones graves son muy comunes en colisiones de alta velocidad. Es importante que se traten con prontitud para evitar que pongan en peligro su vida.
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